lunes, 1 de febrero de 2016

Cinco Estrellas, más Beagle

Pero cuando los sueños se cumplen, la vida sigue imparable y no queda más que buscar nuevas metas!!! La nuestra ahora es trazar la ruta para la nueva temporada del Alea, pero de eso hablamos más tarde, porque todavía queda mucho Beagle por compartir.

Después de los dos días estupendo en Seno Pía, decidimos seguir haciendo rumbo oeste y llegar hasta caleta Julia que en nuestro descenso en invierno estaba también inaccesible por el hielo.

Caleta Julia se encuentra en un fiordo, en el lado sur del brazo noroeste, que ofrece tres diferentes fondeos. Los amigos del Galactic habían pasado unos días en Julia, decían que había buenas caminatas. El último de los tres -caleta Cinco Estrellas- es uno de los preferidos de la mayoría de los veleros con quienes habíamos hablado... pero tiene poco calado, la entrada no es la más fácil, hay que atar con cabos a proa y popa porque no hay espacio ni para el ancla. A mi -desde luego- me daba miedo. A Johan -por supuesto- no. Pasamos de largo caleta Julia y pusimos proa a Cinco Estrellas.

Ya llegando al fondeo vimos aparecer un mástil, puff, ya había un velero (según las guías, bien organizados caben dos o tres) así que nos acercamos cautelosos y echando mano del megáfono que tenemos en el palo (no contestaban en la radio) nos comunicamos con la tripulación del Suditude y pedimos permiso para abarloarnos.


Nos dieron su aprobación y empezamos la maniobra. En un ratito estábamos bien atados al vecino y con cuatro cabos a tierra... parecíamos dos moscas en una tela de araña.

Buenas relaciones de vecindad, ataditos por todos los lados, esta vez sin ancla

Antes de tener tiempo de decir ¡todo listo! Francoise tenía cuatro tazas de café listas para nosotros!!!

El lugar es espectacular, se pueden hacer unas bonitas caminatas montaña arriba, rodeados de cascadas, ríos...





El día estaba algo lluvioso y por los partes de meteo que teníamos, muy ventoso en el canal aunque en el fondeo no se notaba en absoluto.



Aprovechamos para caminar y disfrutar de esas pequeñas maravillas que se esconden en muchos rincones si sabes mirar bien

Por fin un martín pescador que nos sale bien enfocado!!









Dos veces en la misma caleta!!

Pero -en mi opinión- lo mejor de lo mejor, las vistas de los dos veleros en ese huequito inventado por el fiordo. Sí, sin discusión, a pesar de mis miedos un lugar Cinco Estrellas. Gracias de nuevo Johan por no hacerme más caso del necesario
Pequeños como garbancitos en medio de tanta grandeza.
 Protegidos como en el mejor de los escondites

sin comentarios, no me perdonaría habérmelo perdido.

Como os podéis imaginar yo, otra vez, me divertí como una niña. Será la actitud, será el lugar, será la compañía, será...


Buscando florecillas en el bosque

 Dejamos Cinco Estrellas, después de una buena cena con el Suditude, de discutir -entre risas- cómo se hace un buen as de guía, de caminar, remar y demás... e iniciamos el camino de regreso hacia Pto Williams.

Desde luego nos esperaba un nuevo paseo frente a los glaciares






 En el camino paramos en Caleta Sonia y volvimos a visitar a la familia -nueva- que vive en el faro; es muy enriquecedor compartir un rato de charla con gente que vive de un modo tan radicalmente distinto: esta vez una familia con dos niños que aun no se había habituado a su hogar de los próximos meses que no tuvieron problemas para charlar sobre sus expectativas y sus ilusiones pero también sobre sus recelos y sus miedos. Nosotros llevamos una tarta de manzana, ellos hicieron una tarta de melocotón y nos regalaron un pan riquísimo.
Sí, el Beagle no solo nos está regalando las más bellas de las imágenes, también nos está dejando encima unos kilos de más.


¿quién dijo que a bordo solo se puede comer algo sencillo?
empanada de espicanas hecha "en ruta", grande, eso sí.

El camino todavía nos tenía preparada otra sorpresa, habíamos navegado un buen rato acompañados de delfines, pero en un momento dado Johan gritó “ballenas!”.

A lo lejos se veían claramente los chorros de agua característicos de estos cetáceos. Era un grupo de tres que iban nadando hacia nosotros.
Un rato después vimos las señales de otro grupo, guau!!!, genial.
Pudimos verlas bien cerquita y hasta hacer una foto aceptable. Aquí os la dejamos por si algún experto nos puede confirmar de qué tipo de ballena (o familiar) se trata:


siempre una sorpresa, una grata sorpresa!

Después de Puerto Williams llegamos a Ushuaia -desde donde nuestros amigos tenían que tomar el vuelo- sin jugárnosla con la meteo tan cambiante en estos lugares.


 Y con tiempo suficiente para visitar de nuevo Isla Redonda


donde volvimos a caminar por sus senderos y donde -es que no tenemos perdón- nos regalamos otro de esos asaditos a los que tanto nos estamos acostumbrando!!!


Y entre esto y aquello se nos escapó diciembre y el año de las manos!!

El mes de enero también ha tenido sus aventuras -las dejamos para la próxima entrada- pero nos ha tenido bastante ocupados trazando la ruta para los próximos meses.

El destino final (a largo plazo) lo teníamos claro: nos vamos a Groenlandia, despacito como siempre

El camino para llegar ha sido lo que nos ha tenido pensando, pensando. Tal vez la ruta de navegación más rápida y sencilla era remontar los canales y desde Pto Montt subir llevados por la corriente de Humboldt y los vientos portantes hasta Panamá. La ruta más novedosa, subir por la costa Atlántica del cono sur y así descubrir nuevos países pero sobre todo encontrarnos con buenos amigos que nos esperan en tierras argentinas y -por qué no- para circunvalar América del Sur (Tobago-Tobago) que nos parece divertido.

Al final se impuso la aventura, la amistad... quien sabe, pero el 15 de marzo partimos hacia Buenos Aires y buscamos compañía!!! Pincha aquí para mas info.

Hasta ahí nos queda algún paseo por el Beagle y sobre todo Cabo de Hornos... esto del sur todavía no se ha terminado!!!!!!!!!!!




1 comentario:

Dennis dijo...

Hola Silvia:

Dificil saberlo con una sola foto, pero podría ser una Minke (O rorcual aliblanco) Balaenoptera acurostrata por la altura de la aleta dorsal.
Característico que no es de las mas grandes y las aletas pectorales de mediano tamaño y blancas en el medio...

¡Quien pudiese estar ahí!!!