martes, 6 de diciembre de 2011

Islas Canarias, Fuerteventura

Y llegó un día en que dejábamos atrás Lanzarote para dirigirnos a Fuerteventura de la que personalmente -y desde ya pido disculpas- no sabía nada, de nada; tan sólo que Aitziber nos había contado que era maravillosa, que nos pillaba en ruta y que era el punto de encuentro con unas amigas y antiguas compañeras de trabajo que iban a venir a pasar unos buenos días de mar... no necesitábamos más motivos para poner proa a Corralejo.

Nos habían recomendado reservar sitio ya que con el tráfico que hay aquí por estas fechas la cosa no siempre es fácil; el problema es que muchos de los puertos son del gobierno canario y la gestión de las reservas está centralizada en un único punto... que siempre está comunicando o -al menos en nuestro caso- no responde muy rápido a los correos.

El último día conseguimos hablar con Corralejo y nos prometieron amarre; ya llegando después de una breve travesía (son unas 5 millas) contactamos con radio y nos respondieron sin problemas

- dirijase a la parada del ferry, verá un barco de la guardia civil y siga por ahí todo recto.
- entendido, cambio
- va usted bien, yo lo estoy viendo, siga recto
- (entre nosotros) Johan, yo ahí no veo nada y nos vamos de morros contra las rocas
- muy bien, muy bien, siga recto
- Johan, que nos estampamos, Johan...

ya en el último momento y con un viento considerable, nos silbó el encargado de la marina... a nuestra derecha, para hacernos encajar en el penúltimo amarre del pantalán en una maniobra que todavía me afecta a la boca del estómago cuando la recuerdo... pero ahí estábamos!



Corralejo nos ha encantado; bonita ciudad, un montón de bares agradables, restaurantes donde comer mucho y bien, o bien y de menú del día -baratito- con un par de buenos supermercados (hasta algún centro comercial) y muy próximo a una zona de dunas preciosa!




Después de un día de callejear, de que Johan se cortara el pelo (resultado solo regular) y ya con nuestra nueva tripulación pusimos rumbo al sur de esta isla que sí ofrece más fondeos y algún que otro puertito



Y nos fuimos a Caleta de Fustes (la marina es privada, nos costó 35€, pero el amarre bueno y fácil), la navegación estupenda como lo están siendo todas en estas aguas, el destino, bueno, muy pero que muy turistico -no de nuestros favoritos-
, pero para que nos fuéramos sonrientes el día nos regaló una estupenda puesta de sol!



Siguiente destino: Pozo Negro. Es una cala resguardada donde pudimos pasar la noche fondeados sin problemas.



El pueblecito no son más que cuatro casas y dos bares donde las cervecitas estában maravillosamente frías... y nada más, eso sí, las risas que nos regalamos al regresar a tierra con Aleita, teniendo que subir los seis en la barquita con una mar bastante formada que nos subía y nos bajaba, intentando no ser devueltos a la playa (con las caídas y remojones correspondientes) fueron la guinda del paseo!

De ahí nos dirigimos a Playitas a escasas 3 millas de Gran Tarajal donde teníamos también puerto reservado para unos días.

Nueva navegación placentera, con paisajes maravillosos!



Y fondeos fácil junto a otros tres veleros (éramos unos cuántos que nos "perseguíamos" en nuestro camino hacia el sur), noche de estrellas y sueño mecidos por el mar.

En Playitas, junto al pueblito de toda la vida y casi del mismo tamaño, hay un resort vacacional especializado en deportes (pistas de tenis, campos de golf, piscinas olímpicas etc etc) y cual fue nuestra sorpresa cuando a las 8 de la mañana nos despertó el gritar de la monitora de aerobic que animaba a su cuantiso público a hacer steps al ritmo de la estridente música. ¿quién en su sano juicio se levanta -en mitad de sus vacaciones- para hacer steps a las ocho de la mañana???

Es algo que me encanta de vivir viajando: tener la oportunidad de ver tantas y tan distintas formas de abordar la vida, de buscar la felicidad, de vivir así o asá; toder relativizar cada día un poquito el concepto de "normal", el dejar de sentir que mi ombligo está en la mitad del mundo y que como en mi casa no se hacen las cosas en ningún sitio. Aprender lo que me parece mejor y respetar lo que simplemente es distinto... mmmm... viajar!



De Playitas quisimos ir a algún fondeo al sur de Gran Tarajal pero el viento no hacía más que subir y -novedosamente- nos entraba justo de proa; haciendo bordos fuimos ganando millas pero los fondeos que teníamos en mente estaban poco resguardados para un viento que es poco habitual así que giramos y nos fuimos a Gran Tarajal, con viento de popa, haciendo en una hora lo que nos había costado tres...


Nuestras amigas alquilaron un coche para pasar dos días visitando la isla y nosotros nos quedamos a bordo para seguir con nuestras tareas -que no se acaban nunca- y fuimos cambiando los obenques. Es "divertido" constatar que cuatro vecinos se preocuparon bastante por si en la maniobra el palo se nos venía abajo y lastimábamos sus embarcaciones (todos se interesaron fervorosamente por nuestro seguro) y sólo uno le pidió a Johan que tuviera cuidado porque podía hacerse mucho daño si había algún problema estando allí arriba... en fin, c'est la vie.

A penas unos días más tarde esperábamos la visita de la madre y la hermana de Johan que venían a pasar una semanita antes de que diéramos el gran salto.

En esos días Johan empezó a resentirse de una hernia inguinal que estaba por ahí -digamos que en estado latente- desde hacía meses pero que no había empezado a molestar de verdad hasta ahora. Le empezaba a doler con apenas cualquier esfuerzo, simplemente caminando, así que nos fuimos al hospital a hacer la consulta y el diagnóstico no dejó lugar a dudas: doble hernia inguinal, necesidad de operación, vida normal pero si se daban tal y tal síntoma, salir corriendo para operar de urgencias. Visita previa con el cirujano a finales de año, fecha aproximada de la operación febrero.

Glups!!! esto desbarataba completamente nuestros planes (TODOS NUESTROS PLANES). Pusimos a trabajar rápidamente la máquina de pensar... y entre tanto llegó la familia.

Recibimos a las chicas van der Veen con el velero amarrado popa al muelle; para entrar había que dar un "saltito" chico y listos (poner la pasarela equivalía a invadir el pantalán completamente); alehop y todos arriba con maletas y demás equipo.

Cenita de reencuentro, noche tranquila... pero la mami de Johan (ochenta y tantos a sus espaldas) dijo en el desayuno que estaba un poco preocupada con lo de entrar y salir con el saltito, vamos que ella no salía más del barco de esa manera -que por otro lado era la única-.

Ese día tocó turismo náutico y de momento posponíamos el problema del sube y baja a bordo!

Tuvimos ¿suerte? ¿mala suerte?... no sé, tuvimos mucho viento! pusimos rumbo a las Playitas -aquí al ladito- y con poco más de la mitad de la génova desplegada por todo velamen nos pusimos a casi 7 nudos sin sentir!!!



Eso sí, todos disfrutando de lo lindo y sin perder la sonrisa ni la compostura (estos holandeses parece que en otra vida todos fueron navegantes y algo les ha quedado en los genes); si en lugar de la madre de Johan hubiera sido la mía.................




En fin, que como el viento no amainaba y el fondeo más protegido de la zona es el de Gran Tarajal -o sea, el de casa- dimos una vueltita más y nos volvimos para atrás para pasar el resto del día fondeados, dejándonos mecer por el mar, y bañándonos un ratito



(si alguien piensa que tengo cara de pánico mientras Klarie parece disfutar, el pensamiento es acertado. El agua estaba a 24º, muy poquito para mi!)

Y al regresar amarramos el barco proa al muelle; para bajar nos ingeniamos una "escalera" con la pasarela que a mí me daba mucho más miedo que el saltito por la popa... pero el invento no amedrantó para nada a la interesada que subía y bajaba sin ayuda como una atleta!



Los días siguientes alquilamos un coche y nos fuimos a descubrir los encantos de la isla y nos convertimos en turistas, en verdaderos turistas de manual, foto para arriba foto para abajo, paradita para el aperitivo, comida típica!!!




Visitamos nuevamente Corralejo y recorrimos la zona de las dunas (arena blanca sobre una isla completamente negra; según algunos llegada del Sahara con el viento, según otros por mar, pero en cualquier caso arena sahariana en la negra isla volcánica): precioso!!!



Después nos fuimos a visitar el Cotillo del que todo el mundo habla fenomenal; fue nuestro primer encuentro con la otra cara de la isla que ya nos habían dicho era poco apta para navegar, no tiene fondeos ni a penas puertos (el de Cotillo es un puerto de pescadores y habríamos pagado por ver a alguno entrar allí con el mar que había), siempre castigada por el viento... y menudo mar!


Desde el Cotillo seguimos rumbo a Betancuria, nos paramos en un mirador ESPECTACULAR, que nos dejó con la boca abierta (y bastante despeinados porque soplaba un viento increible)




Betancuria es un pueblo de interior, con mucho encanto, pero al que llegamos al caer la tarde cuando todo estaba ya cerrado; eso sí, nos encantó pasear por sus calles.



y descubrir algún rincón tan bonito que me daban ganas de hacerme pintora



Dejamos el sur de la isla para el día siguiente en que visitamos Costa Calma -que según nos han explicado nunca está calmada y acostumbra a estar muy azotada por el viento- y descubrir las preciosas playas de Jandía para celebrar lo bien que nos lo estábamos pasando con una comida en Morro Jable



Y la tarde la dedicamos a explorar las cuevas de Ajuí. Lo cierto es que el mar es impresionante en la cara oeste de la isla;



un par de días antes de nuestra visita hubo fuerza 8/9 y cerraron las cuevas a las visitas por la altitud que alcanzaban las olas... cuando llegamos nadie se había acordado de quitar las cintas que impedían el paso, cosa que no impedía a nadie pasar sobre ellas para hacer el precioso camino hasta las cuevas.



claro que nadie se acercaba hasta la línea de agua, que ni con el mar más calmado parecía recomendable



Poco a poco pasó la semana con la familia, de forma tranquila y sin sobresaltos, con un regustito extraño de saber que a partir de ahora las visitas no van a ser tan sencillas y por lo tanto no es seguro que puedan ser tan seguidas; saber que no nos vamos a ver por unos meses... largos!

Y finalmente nos quedamos solos; bueno, no es una afirmación del todo cierta porque entre visita turística y paseo por Gran Tarajal, conseguimos cita en un hospital de Holanda para que Johan se operara sin más demora y así poder cruzar el charco y seguir con nuestros planes de llegar a Groenlandia en verano.

Dos días después que su familia Johan voló ha Holanda y la que se quedó sola cuidando de la casa fui yo, deseando desdoblarme y estar a la vez en el velero, en el pantalán (y ya puestos en casa visitando a la familia)



La operación ha sido un éxito y Johan está de regreso en su casa, el Alea, pero con prescripción médica de reposo absoluto por un mes y actividad moderada en el siguiente.

O sea, que no podemos navegar hasta dentro de unos días cuando se cumpla el mes de la intervención, que nos hemos quedado sin visitar Cabo Verde, que pensamos que cruzar el Atlántico bien puede definirse como actividad moderada -esa que nos podemos permitir después del mes de reposo absoluto-; así que si no hay mayor novedad nos vamos en unos días, en apenas unos días

Atlántico: prepárate que vamos!

5 comentarios:

Inquieto dijo...

Siempre sigo tus relatos con mucho placer.
Les deseo que tengan una buena travesía para el cruce. ¿No hay algún tipo de faja que lo cuide a Johan durante su convalecencia?

silvia dijo...

Hola Inquieta, gracias por escribir -y por estar ahí, claro-.
Para Johan la recomendación no ha sido una faja, le han dicho que basta con que use por una temporada "calzoncillos apretaos", así que haremos el cruce con boxer de una talla menos de la habitual!!!

RALIP.V dijo...

Cuidaros y buena travesia.

adolfo dijo...

SIEMPRE ES GRATO SEGUIRLOS A TRAVES DE SUS COMENTARIOS, LES ESCRIBO DESDE CHILE....PUES A CUIDAR PARA QUE CRUCEN SIN NOVEDAD...SALUDOS ADOLFO

Enrique dijo...

Enrique dijo he descubierto hoy esta pág y estoy sorprendido por lo de la oparacion de Johan, ya en junio tenia problemas, quizás lo más pesado es la espera para salir.Os deseo todo lo mejor,Suerte