domingo, 22 de mayo de 2011

Creta: Rethimo.


En nuestro primer verano en Grecia coincidimos con un velero de alquiler en el que viajaban 8 jóvenes griegos; uno de ellos -el que capitaneaba el barco- era un experto conocedor de las aguas del Egeo y charlando con él sobre lugares a visitar nos comentó que NO nos recomendaba Creta.

Nosotros, cabezones, y a pesar de que el viento nos invitaba día tras día a buscar otra ruta, decidimos llegar hasta aquí... para acabar dándole la razón a nuestro amigo.

Creta es una isla bonita, pero tal vez no ideal para visitarla en velero.

Desde luego la cuestión es más que opinable; en la marina de Agios Nikolaos encontramos muchos veleros que han hecho de Creta su puerto base para moverse por Grecia, incluso uno de ellos había redactado una guía extensa sobre fondeos y lugares de interés (parece que el autor de la Pilot de Imray que manejamos la mayoría tampoco es un entusiasta de Creta a la que dedica bien poco espacio) y que se puede adquirir (creo que gratuitamente) en la marina.

La isla tiene escasos puertos (Sitia, Ag. Nikolaos, Iraklion, Rethimo, Souda, Channia) y distan entre sí un buen número de millas -nosotros estamos acostumbrados a navegaciones más cortas- de modo que si no hay espacio en uno, llegar al siguiente te supone un buen rato más; claro, que seguro que hay quien opina que esa es la mejor forma de navegar: muchas millas por la proa!

Desde nuestro punto de vista es una buena isla para visitar llegando a ella por avión y alquilando un coche ya que tiene muchos lugares de interés, que vale la pena visitar peeeero..........

En fin, que cuando alquilamos el coche y recalamos en Iraklion la ciudad no nos entusiasmó demasiado (aunque el museo arqueológico es precioso y él solo ya merece la visita) y el puerto estaba más que completo, así que al planear la ruta a seguir cuando dejamos Agios Nikolaos, decidimos poner rumbo directo a Rethimo.




Nos separaban de nuestro destino 80 millas así que para no llegar tardísimo (nuestra media habitual es de 5 Mn/h) teníamos que madrugar.

A las 5'30, todavía de noche y con una marina en completo silencio, soltamos amarras. Cuando solté la última pude ver como al final del cabo había un nudo (un ocho para ser más exactos) que no sabemos como llegó ahí (¿fantasmas? ¿duendes?) pero que era evidente que no iba a pasar por el ojo del anillo en el que estábamos amarrados... así que le grité a Johan ¡para el motor! y clonk... frenazo.

Menos mal que no había chispita de viento, que las defensas aún estaban puestas, que el velero vecino no tenía gente a bordo pero sí la pasarela puesta porque estaban trabajando en él... total que en dos minutos yo había saltado a tierra, deshecho el entuerto y nuevamente estábamos embocando la salida.

El mar nos recibió escasito de viento y la travesía fue durante todo el día un juego de subir y bajar la vela, poner y quitar el motor pero fue uno de esos días perfectos para seguir adelante con mis clases de vela, que sigo en ello, sin prisa pero sin pausa



A las 12 pasábamos a babor de la isla de Dia donde nos habían indicado que hay un buen fondeo -plan B si quieres ir a Iraklion y no hay plaza- pero nosotros seguimos hasta llegar a Rethimo a eso de las 19,30 (el promedio esta vez fue de 5'7... ¡nada mal!) ya de noche y para variar con el viento más fuerte de toda la jornada.


Encontramos sin problema espacio abarloados al muelle y un pescador nos ayudó con la maniobra así que podíamos concluir que el día había sido perfecto


Amarrados en 35º22'1N 024º28'9E con un calado de 5'5m; hay agua y luz en el muelle y no vinieron a cobrarnos nada en los 5 días que nos quedamos.

Como premio nos fuimos a descubrir la ciudad para celebrarlo, como es habitual, comiendo un gyros (el gyros consite en un bocadillo en pan de pita acompañado de la carne que cocinan al estilo turco -aunque aquí la comparación no está bien vista- que vemos en los puestos de kebbab; puedes comer un gyros por 2 euros sin problema!)


Rethimo es por encima de cualquier otra cosa, una ciudad universitaria: hay muchísima gente joven paseando por las calles, bares, tabernitas, más bares, peluquerías con precios "jóvenes", tiendas de ropa joven... ¡un gustazo!


Tal vez no sea la ciudad más bonita del mundo pero tiene rincones encantadores, una muralla que la preside, un pequeño puerto pesquero (sin demasiado calado y en el que no se adminten veleros de recreo) que a nosotros nos la hicieron muy atractiva!






Aunque queríamos estar unos dos días el viento decidió por nosotros y nos dejó durante casi una semana amarrados a puerto;




ahí nos encontramos con dos o tres barcos con gente que había pasado el invierno en Rethimo y que como nosotros tienen en mente cruzar el charco este invierno (no vamos a caber todos!!!!!!!!!!)



Y como tuvimos tiempo de pasear nos encontramos con esta imagen que para nosotros empieza a ser habitual pero que aun nos arranca una buena sonrisa: en Grecia -no sé en Atenas, pero sí en las islas- no es extraño encontrar un comercio de electrodomésiticos, en este caso, con un aparador tan pequeño o inexistente que le lleva a exponer el producto en plena acera; cuando llega la hora del cierre de medio día, lejos de recoger todo el material para volver a sacarlo tres horas más tarde, lo dejan todo tal cuál (incluidas pequeñas cosas que sería terriblemente fácil coger sin más).

Nos han explicado que la gente no roba nada... ¿por qué iban a hacerlo?



¡NOS GUSTA GRECIA Y NOS GUSTAN SUS GENTES!



1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué buena gente!! en españa esos electrodomésticos no durarian ni medio minuto.

J.